Nuestro Producto

«¿Quién de nosotros no ha disfrutado alguna vez de un buen plato de huevos fritos de los que nos hacían nuestras abuelas? Esos huevos de una yema de color amarillo anaranjado intenso, con una textura más consistente y con ese sabor inconfundible a huevo, huevo, como los de antes.»

¿Sabías que los huevos camperos no solo son buenos para ti, sino también para las gallinas? 🐔💚

En Camperos Campos, nuestras gallinas viven felices en el campo, paseando y comiendo a su ritmo. Esto no solo mejora su bienestar, sino que también da como resultado unos huevos frescos, sabrosos y más nutritivos para ti y los tuyos. 🥚✨

Comer bien empieza por respetar a los animales y su entorno. ¡Así que no lo dudes, elige siempre huevos camperos!

Recuperando Tradicion

Nuestra idea surge con el objetivo de ofrecer al mercado y al diente, un producto más saludable que el convencional. Respetando el medio ambiente y sobre todo a nuestros animales. Un producto que se diferencie del resto tanto por su forma de obtención (a través de gallinas criadas en libertad) como por el resultado final (huevos más sanos y sabrosos). Estamos convencidos de que este es el secreto para obtener huevos camperos de la mejor calidad.

01. Huevos

El huevo es uno de los alimentos más ricos, básico en una buena alimentación, con un alto contenido de nutrientes. Además, se puede preparar de mil y una maneras. Pero no todos los huevos son iguales, es la forma de criar de las gallinas la que determina qué tipo de huevo es. Es por ello que finalmente nos decidimos a poner una granja de gallinas camperas, para recuperar esos huevos de antes, más naturales y más sabrosos, , apoyando así el respeto, buen trato y bienestar de los animales, y todo ello en las mejores condiciones de higiene y alimentación.

02. Gallinas

Desde que nacen, nuestras gallinas son criadas con un mimo y cuidados especiales para asegurar el máximo confort y la mejor calidad de nuestros huevos. Llegan a la granja con 17 semanas de vida aproximadamente, y
durante los siguientes 15 días se aclimatan a su nueva casa, a sus comederos y bebederos, y a sus lugares de puesta y descanso. Una vez que ya están aclimatadas, nuestras gallinas tienen acceso durante prácticamente todo el día a un parque al aire libre de más de 8.000 m2 donde pueden moverse libremente, campar a sus anchas, rascar tierra en busca de gusanos e insectos, picotear hierbas y raíces, tomar el sol, darse baños de arena para limpiar su plumaje, etc.